Y en la cola del paro…
Hoy he tenido mi
primera experiencia en esta cola. Afortunado. Son las 8’30, hace mucho frio
natural, también del otro, el que produce la impotencia, la debilidad, el
desamparo…tristeza. Estamos unas 15 personas a esa hora: casi la mitad jóvenes,
tres o cuatro mayores, dos o tres más mayores y una persona africana (alto,
joven, fuerte, de mirada triste). En pocos minutos ya éramos 4 ó 5 veces más…
Durante la espera,
uno de estos hombres de mediana edad, se entretenía en darnos “su visión y las
soluciones a los males de este país”; “lo
tengo muy claro”, decía.
-
“Todos los políticos eran unos ladrones”…”con
Franco solo era uno y teníamos trabajo, todo lo que tenemos se lo debemos a él:
vivíamos mejor!!.
-
“La culpa de todo lo que está pasando
la tienen, primero Felipe González y después Zapatero”…”que nos ha dejado en la
ruina de la que solo nos pueden sacar Aznar o un Franco”. Un joven apunta que hacía falta: “la Falange Autentica”. Otros dos jóvenes
estaban convencidos “de que vivíamos por
encima de nuestras posibilidades”.
Me sonaba esta música, pero no esperaba oírla en la cola del
paro, de gente humilde y trabajadora. Casi todos callaban y si hablaba alguno
era para darles la razón.
“Porque”, seguía el elemento, “antes no había tanto ladrón de abuelas, ni maltrato a las mujeres, ni
tantos emigrantes”… las soluciones suyas, haciendo uso de la libertad de
expresión, que “para eso estábamos en
democracia”, consistían en “cortar
cabezas, o un tiro… ¡cárcel no!, eso es “un
coladero y caro”.
Triste, muy triste…para echarse a temblar y no del frio.
Intenté convencer al exaltado de su equivocación sin ningún éxito. Lo tenía muy
claro, no le valían otras opiniones.
Este discurso fatalista se repite y propaga de manera
temeraria, creo yo, en medios de comunicación ultras, en tertulias de
desinformadores que mezclan rabia y mala leche en un coctel explosivo. A la
ciudadanía se le está inculcando miedo y
falsedades, se le despoja de toda dignidad humana, no tiene libertad a
decidir…NO TENEMOS TRABAJO, no tenemos libertad económica, nuestra indignación
puede acabar en terror.
Ante tanta injusticia, ante tanto desencanto lo último que
necesitamos son salva patrias o
pirómanos.
Educación cívica, honradez a todos los niveles y
responsabilidad. Mucha responsabilidad y honradez en los cargos públicos.
Mariano Jurado Arcos, (Delegado de Medicus Mundi Alacant en Aldaia)
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